miércoles, noviembre 14, 2007

Piel

Por tu propia piel
encontré tu cintura
en un gesto de agonía

y cuando acaricié
tu seno
como un leño
que pendía de un latido,

abarqué tu cuerpo
y te sentí vencida:

Eras el comienzo
de una madrugada
con sentido

1 comentario:

YULI PAOLA HERNANDEZ dijo...

Hola Rayo de Luna,

TUS HOJOS HOY FLORECEN EN MI PIEL...

Cuatro poemas simplemente hermosos...

Alimentan los sentimientos de una soñadora como yo.

Gracias por compartir cosas tan especiales con tus lectores.